Romina Urra y José Tomás Ibarra
Las huertas familiares son sistemas socio-ecológicos que cumplen un importante papel en la conservación de la agrobiodiversidad y de procesos socio-culturales locales. Con base en distintas fuentes bibliográficas, se compiló y analizó la información existente sobre las huertas familiares en Chile, especialmente los datos referidos a composición, riqueza y usos de especies vegetales. Se analizó la información según zona geográfica norte (N), centro-sur
(CS) y sur (S) del país. Se encontraron 46 estudios, los cuales reportaron 125 especies cultivadas pertenecientes a 46 familias a nivel nacional. Del total, predominaron las plantas usadas en la alimentación (54%) y medicina (23%). Mediante el Índice de Jaccard se obtuvo una mayor similitud entre las familias de plantas cultivadas en las zonas CS y S (47%), seguido por N y S (31%). Quince familias de plantas fueron exclusivas para la zona N, nueve para la zona CS y tres para la S. De las 125 especies registradas, al menos 25 (20%) se cultivaban desde épocas pre-hispánicas (previo a 1541). Algunas especies como Chenopodium quinoa, Zea mays, Phaseolus coccineus, Solanum tuberosum y Capsicum annuum, fueron ampliamente reportadas a la llegada de los españoles, junto a otras ya extintas como Madia sativa y Bromus mango. Existe un bajo conocimiento sobre la diversidad de plantas cultivadas dentro de las huertas en Chile. En la huerta familiar se genera activamente una trama de conocimientos que permiten la mantención de especies vegetales y procesos culturales asociados. La actual disminución de la pequeña agricultura en Chile podría producir una erosión cultural y, en consecuencia, de la agrobiodiversidad asociada a las huertas familiares.