"Salir de la rutina y poner las manos en la tierra”: estudiantes del Campus Villarrica UC cuentan su experiencia participando en los Miércoles Huerteros de la Huerta Agroecológica El Boldo

Un espacio de aprendizaje, pero también de relajo y distensión. Así califican los estudiantes que durante este semestre han participado de una iniciativa que busca revalorizar uno de los pilares fundamentales de la Huerta El Boldo: la comunidad.

Durante el primer semestre de 2023, la Huerta Agroecológica El Boldo del Centro UC de Desarrollo Local invitó a la comunidad UC del Campus Villarrica a sumarse a la iniciativa “Miércoles Huerteros”, espacio de encuentro que busca desarrollar una verdadera comunidad huertera al interior del Campus, tal como ya ocurre con otras iniciativas similares desarrolladas al interior de la UC. 

“La invitación nace desde el origen de esta huerta comunitaria El Boldo, donde la participación de la comunidad es un pilar fundamental”, asegura la encargada de la huerta, Claudia Ríos, responsable de estos encuentros.  

 

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Los y las estudiantes que han participado de los Miércoles Huerteros son guiados cada semana por la encargada de la huerta, Claudia Ríos. "Es una oportunidad no solo de aprender sino también de pasar un tiempo en la naturaleza", dice Ríos.

 

A la invitación realizada respondieron funcionarios y académicos, pero, sobre todo, estudiantes del Campus, con especial participación de estudiantes del minor en Desarrollo Sustentable, programa que cada primer semestre abre vacantes para estudiantes de College UC en Santiago que aterrizan en el territorio gracias a becas otorgadas por la Fundación Ibáñez Atkinson. 

En estos espacios las y los estudiantes, tanto de las carreras de Pedagogía del Campus, como del minor, encontraron un espacio para desarrollar herramientas pertinentes a su formación, pero también para relajarse y aprender más sobre los ciclos de la tierra. 

 

Fomentando la pedagogía en la huerta 

“Aquí puedo poner en práctica los contenidos que veo en mi carrera”, asegura Marcela Huisca, estudiante de la carrera de Pedagogía General Básica. “Me llama mucho la atención el tema de las huertas, cómo se pueden trabajar y cómo se pueden implementar en el aula”. 

A sus palabras se suman las de su compañero Benjamín Rodríguez, quien asegura que el espacio es una forma de crear herramientas para su desarrollo como profesionales de la educación.  

“La mayoría de los profesores siempre nos han inculcado trabajar con los estudiantes en base a los conocimientos que ellos tengan”, explica Benjamín, “y yo, que personalmente me quiero enfocar en un área rural, siento que esto es clave al momento de llevarlo después a la escuela, es de vital importancia conocer las huertas y su funcionamiento”. 

“También es conocer y ocupar los conocimientos que tienen les niñes (sic) y las familias y hacer un proceso de construcción social en torno a la huerta y juntarnos a huertear, poder compartir conocimientos en familia”, agrega Marcela, “un proceso importante que tenemos acá y donde tenemos este espacio que no es tan conocido en el Campus, pero que es muy nutritivo porque nos enseña diferentes cosas”. 

“La idea es que puedan sacar ideas, herramientas”, agrega Claudia Ríos, “pensando que sus escenarios futuros van a tener huertas o algo similar”. 

 

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Las actividades de cuidado desarrolladas por estudiantes han sido un pilar fundamental en el funcionamiento de la huerta durante este semestre.  

 

Adentrarse en el territorio 

“Ha sido una experiencia súper enriquecedora”, asegura una de las estudiantes que llegó desde Santiago a raíz del minor, Javiera Olavarría, de la Licenciatura en Cs. Naturales y Matemáticas de College UC, “y el conocimiento que uno ha adquirido en instancias como el intercambio de semillas, donde tienes la oportunidad de conversar con señoras que te recomiendan no plantar porotos en luna creciente porque no se van a dar, por ejemplo, es interesante y enriquecedor”. 

En el caso de estos estudiantes, que se han convertido en participantes constantes de los Miércoles Huerteros, la instancia también ofrece una experiencia que los conecta con el territorio y con las prácticas culturales en torno a la huerta que aquí se desarrollan.  

“La Huerta El Boldo visibiliza cómo se vive aquí en Villarrica”, afirma Estela Carrasco, otra de las estudiantes que vino de Santiago, “he escuchado que los profesores tienen huertas en las casas o que mis compañeros quieren aplicar la huerta como metodología de enseñanza. En Santiago eso nunca se escucha". 

“Las conversaciones que van saliendo son de harto aprendizaje colectivo”, explica en ese sentido la encargada de la huerta, Claudia Ríos, “también tuvimos la oportunidad de cocinar una de las cosechas, comerlas juntos, participar del intercambio y que fueran protagonistas: ayudaron en la cosecha, en el procesamiento de la semilla y luego también participaron de la acción misma del Intercambio”. 

Estela agrega que los Miércoles Huerteros son una forma de abrir un espacio de relajo y distensión. “Yo no lo veo como una actividad tan técnica, quizás más recreativa, como un espacio para salir de la rutina y poner las manos en la tierra, y creo que hemos aprendido mucho. Además, se da la oportunidad de estar con otra gente que no está en tu carrera”. 

“Cuando estás en la huerta, te obliga a estar ahí”, agrega en la misma línea Claudia Ríos, “no estás con el celular y te obliga a conectarte con el momento presente y desconectarte un rato (…) es una oportunidad no solo de aprender sino también de pasar un tiempo en la naturaleza, con todos los beneficios que esto implica”. 

“Ha sido experimentar todo eso que algún minuto nos contaron en la teoría, verlo en el territorio”, agrega Javiera por su parte, mientras que Sebastián González, también del grupo de estudiantes del minor, explica que venir a Villarrica fue una forma de cambiar de ambiente. “Tomé la oportunidad para escaparme un rato, un semestre diferente, y ha sido súper bueno (…) me gustó harto trabajar con la tierra y ver los ciclos: si yo planto algo, después vemos cómo va creciendo y resultando”. 

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Las labores desarrolladas por los y las estudiantes que han participado de los Miércoles Huerteros incluyen el desmalezar, limpiar, trasplantar y preparar el suelo.

 

Trabajo y aprendizaje colectivo 

“El trabajo semana a semana es en base al calendario agrícola (...) y ahora es el fuerte comenzar todos los almácigos de primavera-verano", explica Claudia sobre las actividades desarrolladas en estos encuentros, “y hay labores que son permanentes: desmalezar, limpiar, trasplantar, limpiar la tierra cuando hay que preparar el suelo". 

La experiencia se ha convertido para los estudiantes en un aprendizaje constante que les permite también desarrollar herramientas para el desarrollo de sus propias huertas. “En mi casa hemos hecho huertas, pero siempre las abandonamos”, cuenta Luna Vargas, del minor en Desarrollo Sustentable que es originaria de La Araucanía, "entonces me llevo harto aprendizaje de cómo preparar la tierra, cómo plantar las cosas, verlas crecer”. 

Por su parte, Marcela asegura que "uno de los proyectos que tenemos en mi casa en Santiago es hacer una mini huerta o algo así con mi papá y ahora estoy aprendiendo lo que puedo". 

Para el resto del año, la encargada de la huerta abre los espacios de colaboración para continuar desarrollando este tipo de iniciativas. “Esperamos que este segundo semestre los y las estudiantes, académicos y funcionarios se hagan parte y protagonistas de este espacio, donde podrían incluso adoptar parte de un bancal y tener sus propios experimentos ahí”, sugiere Claudia, haciendo énfasis en la llegada de la primavera y las oportunidades que ello trae para la huerta al tiempo que nos preparamos para el verano.  

“Las huertas florecen en la primavera y verano en La Araucanía, ya que el sol vuelve y con él las temperaturas (…) es un momento muy esperado, de la primavera dependen las cosechas del verano, es un tiempo de mucho trabajo, observación y disfrute de los sabores y olores que se empiezan a experimentar”. 

 

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Para el segundo semestre de este 2023 se espera continuar con los Miércoles Huerteros y continuar abriendo el espacio a la comunidad UC en Villarrica. "Esperamos que este segundo semestre los y las estudiantes, académicos y funcionarios se hagan parte y protagonistas de este espacio", dice Claudia Ríos.